En medio del cierre de fronteras y las restricciones adoptadas por los países, transportar pacientes, profesionales de la salud, insumos médicos, o concretar traslados tan urgentes como el de células madre y órganos para trasplantes ha sido el gran desafío del programa Avión Solidario de LATAM Airlines Group en medio de la crisis por Covid-19.
Así, el Avión Solidario transportó a más de 400 profesionales de la salud para atender necesidades de COVID-19 e incluso hizo posible que más de 300 personas con enfermedades fueran trasladadas para recibir un tratamiento médico o cirugías de urgencia en toda la región. Además, por primera vez en su historia, aterrizó en China para transportar insumos médicos, incluyendo ventiladores mecánicos.
A nueve años de su puesta en marcha, el Avión Solidario se ha transformado en un puente aéreo vital para atender las necesidades humanitarias y de salud en Latinoamérica. “El Avión Solidario está activo durante todo el año y hoy más que nunca vuela para apoyar a la región a enfrentar una de las peores crisis sanitarias a nivel mundial. A la fecha hemos transportado más de 400 toneladas de insumos médicos como mascarillas, pruebas rápidas para testear COVID-19, ventiladores mecánicos, medicamentos, entre otros, beneficiando a Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Argentina”, señala la jefa de Sostenibilidad de LATAM Airlines Group, Francisca Arias.
Una nueva oportunidad de vida
Un hecho inédito durante este período fue el traslado de células madre a través de LATAM Cargo para que el Avión Solidario pudiese seguir contribuyendo en materia de salud. Dado que los aviones de carga no tienen restricción para operar, la compañía dispuso de este recurso para dar una segunda posibilidad de vida a pacientes con cáncer de sangre de Chile y Argentina.
Avión Solidario cuenta con una alianza con la Fundación DKMS cuya misión es encontrar donantes compatibles para quienes padecen cáncer de sangre sin importar en qué parte del mundo se encuentren.
Al cierre de 2019, el programa, que está presente en toda la región (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú) transportó más de 4.000 pacientes y equipos multidisciplinarios, permitió el transporte de más de 800 órganos y/o tejidos y también el traslado de 87 toneladas de carga ante necesidades de salud y ayuda humanitaria.